Cáritas León integra a 14 personas privadas de libertad como braceros en la Procesión del Perdón

Desde 2003, el programa penitenciario de Cáritas Diocesana de León es un pilar en el acompañamiento a personas internas y sus familias.

León, 25 de marzo de 2024. En una iniciativa que combina tradición y esperanza, Cáritas Diocesana de León ha integrado a catorce personas reclusas del Centro Penitenciario de León y de su Centro de Inserción Social como braceros en la Procesión del Perdón. Este acto simboliza un avance significativo en su reintegración social, permitiéndoles conectar con la sociedad en un contexto de respeto y desarrollo personal.

El equipo técnico de Cáritas ha estado involucrado y ha ofrecido su apoyo a las personas participantes en su preparación para la procesión, en colaboración con Instituciones Penitenciarias y la Cofradía del Santo Cristo del Perdón. La participación de dichas personas de manera voluntaria en la procesión del Martes Santo, ya sea que estén en régimen ordinario o de semi libertad, demuestra su esfuerzo por reintegrarse a la sociedad y su avance en el desarrollo personal.

Este año, la iniciativa incluye a una persona voluntaria de Cáritas Diocesana de León, ocho personas internas con permisos ordinarios y otras cinco del Centro de Inserción Social, todas unidas por el deseo de avanzar en sus vidas. La mujer indultada acompañará a las braceras en el paso de la Virgen.

Las personas participantes del programa penitenciario de Cáritas residen en módulos de respeto. Muchas desempeñan trabajos remunerados y participan en programas de rehabilitación, Asimismo, asumen roles importantes en la acogida y guía de otros internos y en la coordinación de actividades. Otros han dado pasos significativos hacia la reintegración laboral, participando en rutas de empleo, formación profesional y prácticas.

Algunas incluso contribuyen a la comunidad a través de iniciativas sociales y voluntariado.
Este apoyo integral, complementado por la red sociofamiliar, es esencial para lograr el objetivo de la reinserción social.

Desde 2003, Cáritas Diocesana de León ha sido un pilar en el acompañamiento a personas privadas de libertad y sus familias. A través de distintos programas, la organización ha facilitado la transición de las personas privadas de libertad hacia una adaptación social efectiva y humana.

El piso de acogida de Cáritas es un ejemplo destacado de este esfuerzo, proporcionando un entorno supervisado donde las personas internas puedan adaptarse al exterior de forma paulatina y acompañada, bajo una planificación de normas y actividades coordinadas por personal técnico y personas voluntarias.