Reflexión de voluntaria de Programa Casa de acogida de mujeres de Cáritas de León durante esta etapa Covid

El Programa Casa de Acogida para la Inserción Sociolaboral de Mujeres en Riesgo de Vulnerabilidad Social cuenta en la actualidad con 9 personas convivientes: 6 mujeres y 3 menores con edades comprendidas entre los 1 y 7 años que proceden de diferentes lugares: Nigeria, Marruecos, Argelina, Nicaragua….

En la casa, que es hogar, llegan con situaciones muy complicadas de indefensión, de verse en la calle porque no tienen dinero con qué pagar un alojamiento, situaciones de prostitución a las que no quieren regresar, abandono familiar, ausencia de permiso de trabajo y residencia, soledad… También padres que no quieren reconocer a sus hijos las dificultades de encontrar un trabajo en este estado de pandemia, más aún cuando no hablas bien el castellano y procedes de otra cultura.

Entrar en esta casa hace que cada una tenga UN TIEMPO, una oportunidad, UN ESPACIO VITAL, sin prisas, donde una puede posicionarse sola o junto con sus pequeños, y formarse, buscar empleo, recuperar la autoestima, descansar sin miedo a que mañana te digan que te tienes que ir, poder hacer amistades, compartir vida con voluntarias.

Es tranquilizador para todas ellas el tener cubiertas esas necesidades urgentes y  básicas como son el alojamiento, la manutención, el calor, etc… Y a partir de ahí, solo depende de cada una el poder aprovechar y cubrir otras necesidades importantes como son las relacionales, las afectivas, las laborales, las formativas. En este momento todas están realizando algún curso: de ayudante de camarera, peluquería, aprendizaje del castellano. Igualmente todos los niños están escolarizados o en guardería, y disponen de acceso a wifi para poder seguir gracias a unas tablets los deberes de sus hijos y también comunicarse con las familias en otros países.

Se conjugan en la convivencia las obligaciones (turnos de limpieza, mantener el silencio en la noche, respecto a la intimidad), con los derechos y los momentos de ocio y la autonomía personal.

Hay un equipo de voluntarias del que formo parte que es fundamental en el acompañamiento y ayuda de las gestiones, además de coordinar la buena marcha de la casa y, cuando no podemos hacernos presentes, siempre estamos cerca a través de llamadas, escucha, apoyo, empatía, mensajes, gestos…

Son muy conscientes de que la pandemia del Covid 19 ha supuesto mucho  dolor para personas más débiles y con problemas, y por eso se sienten -todas ellas- especialmente agradecidas de contar con un lugar como este proyecto, este hogar.

El pasado 31 de marzo realizamos una excursión respetando las medidas de seguridad y protocolos covid 19 con el objetivo de disfrutar de aire libre y poder convivir durante unas horas con las mujeres y menores en un entorno distinto al habitual disfrutando de la naturaleza en un pueblo cercano a León. Fue un momento de esparcimiento, compañerismo, diversión, tranquilidad …. que mereció mucho la pena.

 

C. O. B.

Voluntaria Casa Acogida