Un año más, el Papa Francisco, apoyado por las Uniones Internacionales de Superioras y Superiores Generales (UISG y USG) y por el Consejo Pontificio de Justicia y Paz, nos invitan, en esta Jornada Internacional de Oración contra la Trata de Personas 2016, a participar en vigilias de oración contra la trata de personas que, en la festividad de santa Josefina Bakhita, tiene lugar hoy en todo el mundo.
Josefina Bakhita fue una esclava sudanesa víctimas de abusos y que, una vez liberada,
ingresó en la Congregación de las Hijas de la Caridad Canosianas. Fue declarada santa
en el año 2000.
El triste problema de la trata, como recuerda el Papa Francisco, no se refiere sólo a las
mujeres destinadas a la prostitución, sino también al tráfico de niños y de personas
destinadas al trabajo forzado, a la mendicidad o al tráfico de órganos: fenómenos que a
menudo engendran la que se define como la esclavitud del siglo XXI.
Este fenómeno no afecta únicamente a unas áreas del mundo determinadas, sino que tiene
una dimensión global que implica a tanto los países de procedencia de las personas
víctimas de trata como a los de tránsito y a los países de llegada de las víctimas de esta
lacra inhumana.
“Encender una luz contra la trata”
Ante la extensión y la complejidad de este fenómeno, Cáritas invita a toda su red confederal
en España a “encender una luz contra la trata de personas” en las vigilias de oración que
se celebren en las distintas parroquias y comunidades del país. En el resto del mundo,
todas las Cáritas miembros de la red Cáritas Internationalis participan también en este
gesto global de oración convocado por el Papa.
Esta Jornada Internacional de Oración contra la Trata es un gesto visible en el marco del
Año de la Misericordia, que quiere servir de estímulo a tantos cristianos, laicos y laicas
comprometidos de todo el mundo, y ayudar a leer “estos signos de los tiempos” en clave
de presente.
2,5 millones de víctimas cada año
Según la Organización Internacional del Trabajo y la Oficina de Naciones Unidas, cada año
cerca de 2,5 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños, son víctimas de trata y
de esclavitud. Para los traficantes y proxenetas esta es una de las actividades ilegales más
lucrativas en el mundo, al generar un total de 32.000 millones de dólares al año, lo que lo
convierte en el tercer negocio más rentable después de los tráficos de drogas y de armas.
¿Qué hacemos en este Año de la Misericordia para combatir este escándalo?

Desde hace tiempo, en nuestra sociedad y también en el seno de la Iglesia se viene trabajando de forma coordinada entre diferentes grupos de reflexión, de acción y, también, de oración.Muchas congregaciones religiosas están trabajando activamente en distintos lugares del mundo para prevenir el tráfico de personas, sensibilizando, denunciando causas con incidencia en la política social, acompañando y protegiendo a las víctimas.
Durante el año 2015, en España, han sido frecuentes los eventos contra la Trata,
destacando entre otros, los Encuentros de RENATE (Red Europea de Religiosas contra la
Trata) en Madrid y en Irlanda; o el Encuentro Internacional en El Escorial, los días 30 y 31
de octubre, del Grupo Santa Marta…
Caritas coordina, además, el trabajo de COATNET (una coordinadora que agrupa a las
organizaciones de inspiración cristiana), que es una red mundial de 42 grupos y
organizaciones que luchan contra el tráfico de seres humanos.
El primer paso para vencer a tráfico es aumentar la conciencia mundial sobre cómo este
problema deshumaniza a la gente y llevar este conocimiento al nivel de acción. Por ello, el
Día Internacional de Oración y Concienciación que se celebra hoy es una oportunidad para
dar ese primer paso en la lucha contra la trata.