León, 6 de marzo de 2024. La plataforma de la Iglesia por el Trabajo Decente, de la que forma parte Cáritas Diocesana de León, ha presentado un Manifiesto para conmemorar el Día Internacional de la Mujer el 8M, resaltando cómo la desigualdad de género en el trabajo y los cuidados sigue siendo una realidad. El documento advierte que las mujeres sufren mayor desempleo, temporalidad y jornadas parciales, y exige políticas que promuevan la igualdad efectiva.

Este manifiesto de las entidades de inspiración cristiana que impulsan en España esta iniciativa (Cáritas, Conferencia Española de Religiosos CONFER, Hermandad Obrera de Acción Católica HOAC, Justicia y Paz, Juventud Estudiante Católica JEC y Juventud Obrera Cristiana JOC) subraya la urgencia de abordar estas desigualdades exacerbadas por la pandemia, que ha intensificado los retos en el empleo y la distribución de responsabilidades de cuidado, afectando desproporcionadamente a mujeres y jóvenes.

ITD llama a la acción para garantizar el trabajo decente y la igualdad de oportunidades para todos.

La brecha de género sigue siendo un desafío significativo.  los datos indican que la tasa de desempleo femenina es un 3,06% más alta y hay un 5,39% menos mujeres afiliadas a la Seguridad Social en comparación con los hombres. ITD resalta que las mujeres enfrentan mayores dificultades en el desempleo, brecha salarial, temporalidad, parcialidad y menor participación en la toma de decisiones corporativas, especialmente relevante en la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.

El manifiesto de ITD enfatiza que el 8 de marzo simboliza la continua lucha de las mujeres por la igualdad, justicia y reconocimiento. Destacan la importancia de valorar y redistribuir equitativamente las tareas de cuidado, tradicionalmente asumidas por mujeres, y abogan por políticas que apoyen la conciliación laboral y promuevan la igualdad tanto en el hogar como en el trabajo.

La igualdad en el empleo no solo beneficia a las mujeres sino a la sociedad en su conjunto, ya que la diversidad en el lugar de trabajo conduce a la innovación y resiliencia. La brecha salarial de género, que se sitúa en el 18,7%, es un claro indicador de desigualdad. En el ámbito educativo, las mujeres a menudo se asocian con campos relacionados con el cuidado, y aquellas en áreas como la ingeniería deben probar su valía repetidamente.

ITD insta a fomentar las capacidades individuales y el acceso equitativo a una educación de calidad para romper los ciclos de pobreza y desigualdad. Subrayan la necesidad de colaboración entre gobiernos, empresas y sociedad para implementar políticas y prácticas que promuevan la igualdad, asegurando que cada mujer tenga la oportunidad de desarrollarse y contribuir al bienestar común.

Desde su inicio en 2014, ITD, compuesto por organizaciones católicas y congregaciones religiosas, trabaja para sensibilizar y denunciar la importancia del trabajo humano y abogar por el trabajo decente dentro de la Iglesia y la sociedad.