El pasado jueves, 3 de junio, Cáritas Diocesana de León presentó en rueda de prensa presencial y telemática su Memoria de Actividades 2020, en la que participó el Obispo de León, D. Luis Ángel de las Heras Berzal y directora de la entidad, Dña. Beatriz Gallego Martín acompañada del secretario general D. José Antonio Oliva Bárcena y demás miembros de la directiva.

El acto comenzó con una breve intervención del Obispo de León, insistiendo en la importancia de la esperanza como Iglesia pueblo de Dios, siendo en los más necesitados es donde encontramos el rostro de Cristo y por eso que Cáritas tiene tanta fuerza, porque “es la Iglesia que camina con el Señor al lado de los pobres y llega a tantas necesidades, acompañando a tantas personas para levantarse de su postración”. Además insistió en la “renovación de la exigencia a los poderes públicos para que atiendan a los últimos de la sociedad, y para que defiendan los derechos humanos de todos para vivir una vida digna”

La directora de Cáritas comenzó introduciendo la presentación de la memoria con el lema “Cada Gesto Cuenta” que concretó toda nuestra labor durante el pasado año, y también haciendo un breve balance del año 2020 donde las limitaciones impuestas por la alerta sanitaria han dificultado nuestra labor de acompañamiento teniendo que adaptarnos a las nuevas circunstancias para mantener la actividad de nuestros programas, especialmente en atención primaria. En esa introducción ha denunciado, además, un modelo económico agotado, desigual, contaminado y que explota, reclamando un cambio de estructura que convierta al conjunto de la sociedad en una sociedad justa y equilibrada, afrontando el futuro con unas bases sólidas que coloquen a la persona como centro y no al beneficio económico.

Tras la introducción se dio paso al desarrollo de los programas en los que se ha invertido un total de 1.518.029, y donde cada cifra tiene una historia, la de las 4.267 las personas atendidas y 41.556 intervenciones, que dan una idea de la gravedad de las diferentes situaciones al paliar en muchos casos necesidades extremas sobre todo en vivienda, suministros, alimentación, salud y ayuda para realizar los trámites de documentación.

Las Cáritas Parroquiales destinaron casi 250.000 euros en ayudas a 1.120 personas, con 3.090 beneficiados y casi 13.000 atenciones durante el 2020.

Se insistió en la cifra de personas sin hogar y que no pudieron asumir las normas impuestas por el estado de alarma, lo que obligó a redoblar esfuerzos en red con otras entidades para las 313 personas sin hogar que fueron acogidas durante 2020.

La presentación siguió enumerando datos y nuevas formas de respuesta en economato, atención a toxicomanías, migración y movilidad, casas de acogida, infancia, programa penitenciario y empleo, que ha permitido formar a un centenar de personas y facilitar el acceso a un puesto de trabajo a 52. Para finalizar la enumeración de los programas y en el apartado de economía solidaria, Moda Re gestionó 260.158 kilos de ropa recogidos en 53 puntos, entregando más de 2.074 prendas a personas sin hogar y familias con escasez de recursos.

Fundamental ha sido el papel de los 700 voluntarios que nos han acompañado durante este difícil 2020. Son parte esencial de la identidad de Cáritas y apoyo decisivo para afrontar con éxito en este año tan complicado, gracias a la renovación de la base social con la incorporación de personas más jóvenes. Su labor se ha ido adaptando a las diferentes etapas de la pandemia, combinando la atención presencial con la atención telefónica según las necesidades de cada momento.

Todo el trabajo realizado no hubiera sido posible sin la explosión de solidaridad de la sociedad leonesa, logrando unos ingresos de 1.687.154, 63 euros de presupuesto (80% de origen privado) que ha supuesto un incremento en los recursos que ha permitido a Cáritas Diocesana seguir estando cerca de los más vulnerables y , a la vez, planificar nuevas ayudas y programas.