El Obispo de León, D. Julián López, y la directora de Cáritas Diocesana de León, Dña. Beatriz Gallego, presentaron ayer jueves, 6 de junio,  la Memoria de Actividades de la entidad diocesana correspondiente al 2018, en la que un total de 7.677 personas se beneficiaron de los diferentes programas.

La cifra es similar a la de ejercicios anteriores, aunque hay 900 personas que el año pasado pidieron ayuda por primera vez. “Siguen surgiendo nuevas necesidades, pero la pobreza que afecta a las personas atendidas desde Cáritas es cronificada y está ligada al sistema económico y social, lo que deja tras de sí un porcentaje de personas en exclusión”, indicó Gallego.

En cuanto al perfil de los beneficiarios de los diferentes programas de Cáritas, el 57,7% son españoles y el 42,3% extranjeros y destacan las familias con hijos, que suponen un 30,2% de las personas atendidas por la entidad diocesana. Además, un 26,5% son personas que viven solas y un 13,8% pertenecen a familias monoparentales. Los desempleados son los principales beneficiarios de los programas de Cáritas (86,1%), mientras que un 7,5% son jubilados o pensionistas y un 6,4% están trabajando, aunque en condiciones “muy precarias”, según ha señalado Gallego.

La puerta de acceso a Cáritas es el Programa de Acogida y Atención Primaria, que se lleva a cabo en la sede de Sierra Pambley y en las delegaciones parroquiales de la entidad. Las principales necesidades atendidas están relacionadas fundamentalmente con el apoyo personal y la vivienda: alquileres, electricidad, gas, alimentación, salud, educación… En la sede de Sierra Pambley se ha atendido a 1.369 hogares y en las parroquias a 1.704.

Directamente relacionado con la atención primaria está la ayuda en alimentos. Además de los planes personalizados a través de las parroquias, Cáritas tiene desde 2014 un Economato en el que se ofrecen productos de primera necesidad como alimentación, higiene y limpieza. El año pasado se expidieron 223 carnés familiares y se contabilizaron 863 beneficiarios.

Cáritas tiene también un programa de infancia que incluye ludotecas (154 menores atendidos por 45 voluntarios), apoyo en material escolar, ayuda para la adquisición de calzado dos veces al año y campamentos de verano y campus deportivos.

Otro servicio fundamental de la entidad diocesana es la casa de acogida para mujeres en situación grave de desprotección y abandono. Este centro está atendido por ocho voluntarias y el año pasado acogió a doce mujeres y nueve niños. En diciembre de 2017 Cáritas de León abrió un piso de acogida para hombres en riesgo de exclusión, que cuenta con tres plazas y está atendido por siete voluntarios con el objetivo de proporcionar estabilidad en procesos de inserción a medio y largo plazo.

En cuanto a las personas sin hogar, 232 personas fueron atendidas en la sede de Cáritas y recibieron respuesta a necesidades básicas como salud, alimento, vestido, alojamiento y apoyo en gestiones. Además, hay dos albergues en La Robla (113 beneficiarios) y Cistierna (121). La memoria refleja un total de 392 personas acogidas.

Cáritas tiene, además, otros programas como son atención a toxicomanías (145 personas atendidas), de migración y movilidad humana (907 personas atendidas a la hora de iniciar su nueva vida) y de apoyo a las personas mayores (260 usuarios, 204 voluntarios jóvenes y 30 adultos).

Economía solidaria

La economía solidaria es otro eje fundamental de la actividad de Cáritas. Su programa de formación y empleo atendió el pasado año a 1.427 personas, de las que el 61% eran mujeres y el 39% hombres. Este programa incluye orientación, formación e intermediación laboral. Gallego ha destacado que de las 407 personas que han participado en esta última fase de contacto con las empresas, 124 han encontrado un trabajo (30,5%).

En esta ámbito en 2018 se puso en marcha el proyecto ‘Moda Re-‘ para la gestión de la ropa y el calzado de segunda mano que recibe Cáritas. Esto ha derivado en la creación de una empresa de inserción (‘Comparte León’) que ha generado siete puestos de trabajo y ha gestionado 154.924 kilos de ropa.

Recursos

Finalmente, Gallego ha explicado la procedencia de los recursos con los que Cáritas Diocesana de León se financia. El 73% de los ingresos totales (1.003.242,01 euros) son fondos privados y el 27% públicos. En cuanto a los gastos (1.492.708,46 euros), las mayores partidas se destinan a los programas de acogida y atención primaria y a los de formación y empleo.

Gallego ha atribuido el déficit de casi 116.000 euros al descenso de donaciones y a que la entidad ha mantenido el mismo nivel de actividad de ejercicios anteriores. “Muchas personas han dejado de donar porque piensan que la crisis ha pasado y que la sociedad está más saneada”, ha indicado antes de hacer un llamamiento y de explicar que ese déficit se enjugará con el “fondo de reserva” de ejercicios en los que había más ingresos que gastos.